martes, 14 de mayo de 2013

Pirata de cataratas (parte uno)

No, no viajamos a Iguazú, fuimos a un hospital quirúrgico porque Norberto, mi pareja abierta desde hace quince años, tuvo que hacerse una operación de cataratas en uno de sus ojos. Y como yo tenía un celular y mucha ansiedad, fui tuiteando o posteando en facebook, la crónica de lo acontecido. En un mes le operan el otro ojo, por lo tanto esta es la primera parte de una saga. Acá abajo la cronología completa.

14:00. Estamos haciendo la admisión para que intervengan el ojo derecho de Norberto, que tiene cataratas. Ya le pusieron la pulsera con su nombre.

14:10. Sala de espera en el Instituto Quirúrgico del Callao

14:17. Cada 15 minutos hay que poner gotas en el ojo derecho. En la segunda dosis ya parece un personaje de Poe. Después viene la fase Lovecraft.

14:23. Norberto se puso mucho perfume, sospecho que tiene metejón con el cirujano.

14:35. Subimos al sexto piso, cambiamos una sala de espera por otra. El ojo de Norberto ya es un planeta extraño.

14:50. En el sexto piso hay unas acuarelas espantosas de 1997, decorativamente  menemistas. ¿Quién cura el arte de los hospitales?

15:10. Norberto se queda dormido en la sala de espera, anoche no pegó un ojo (si me permiten la expresión).

15:14. Quinta gota y el ojo derecho de Norberto es lo más parecido a una remake de El exorcista: está poseído. La próxima vez le tiro agua bendita.

15:20. Otra sala de espera. Acá le piden que se ponga un delantal en el baño y que salga "sin mostrar nada". ¿Tendrá cara de exhibicionista?

15:40. La enfermera le toma la presión a Norberto y le pregunta por las pastillas que toma y para qué. Al dar la lista larga de enfermedades en voz alta y clara, porque el nombre de tantas pastillas es difícil de recordar, la media docena de personas que espera quirófano en la misma sala pone cara de póker y traga saliva. ¡Que la sigan tragando!

15:55. Una silla de ruedas se llevó a Norberto. Me dejó un beso y un tufo a perfume incrustado en mis fosas nasales. No paso el antidoping de amor.

16:08. Me hacen esperar en el bar del piso 9.  Me entretengo adivinando la especialidad de médicos, saco siempre a los traumatólogos por la cara.

16:20. La espera me hace maquinar: y si al mirarme con la visión recuperada, Norberto me deja por el cirujano. 15 años de relación en la tiniebla.

16:50. La moza del bar grita: "familiares de Gutipati". Cuando respondo me dice que tengo que ir al 4 piso a recibir el parte de cirugía. Nervios.

17:10. En el 4 piso hay un timbre y desde el parlante me preguntan quién soy. Dije que venía por el parte. Miro una puerta cerrada hace 15 minutos.

17:20. Veinte minutos y nada: la espera me parte.

17:35. Toqué timbre nuevamente: otra voz y desentendimiento de mi reclamo del parte. Ya soy Spiderman, camino por las paredes.

17:45. Tras más de media hora, una enfermera sale y dice que Norberto no ingresó al quirófano y él quiso que me avisen el retraso. Piensa en mí.

18:15. Vuelve la espera. Mastroianni decía que al actor de cine le pagan por esperar en rodajes más que por actuar. Hoy me tocó el papel de boludo.

18:30. 2 horas de Norberto a manos de un cirujano desconocido. Prefiero que lo secuestren en el túnel de Amerika, y él seguro también prefiere eso. A veces pensamos igual

19:05. El pirata ya está en tierra firme, a salvo mas nunca sano. (ver foto de arriba)

1 comentario:

... dijo...

Ey puse artìculo de cha nta nomas lo acabo de leer es muy bueno, espero hallarlo en el túnel de amerika. saludos